El Ayuntamiento de Sevilla, a través de su Delegación de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores, está completando la instalación de 150 señales marcando la limitación de velocidad en las zonas 30 y zonas 20 del casco histórico señalando además la prioridad en la circulación para peatones y ciclistas. Estas medidas, que han tenido un coste de 20.000 euros, se enmarcan dentro de los acuerdos planteados en la Mesa de la Movilidad y están vinculados a los acuerdos presupuestarios para promover el uso de la bicicleta con los distintos grupos políticos. Además de la nueva señalización vertical, se implantarán nuevas marcas viales en el pavimento recordando a los conductores la obligación, en todas aquellas calles con una limitación de 30 Km/h o inferior, de adaptar su velocidad a la de las bicicletas
Una vez instalada toda la señalización en los distintos accesos al Casco Antiguo, se llevará a cabo la declaración formal de Zona 30 de acuerdo con lo establecido por el artículo 6 de la Ordenanza de Circulación. En la práctica, supone limitar el tránsito a 30 kilómetros por hora, conformando un área de especial protección y calmado de tráfico y de coexistencia entre los distintos modos de transporte, especialmente de la bicicleta, dentro de la estrategia de sostenibilidad y de la apuesta por la bici que se está desarrollando por parte de Movilidad.
En paralelo, se están instalando el nuevo diseño de señales que permitan a los ciclistas identificar con mayor facilidad la obligación de bajar de la bicicleta y continuar el camino andando en determinados puntos de la capital sevillana que, por aglomeración de peatones o la existencia de especiales circunstancias, así lo aconsejen por razones de seguridad. En total, se han instalados 50 placas con este nuevo modelo.
Para seleccionar el diseño, los técnicos de la Delegación de Movilidad han llevado a cabo un amplio estudio de la señalización que en esta materia ya existe en otros países con una cultura ciclista más madura, sobre todo países nórdicos, y su necesaria adaptación a la normativa estatal en materia de señalización vertical. El resultado es una nueva señal que permite a los ciclistas percatarse con mayor facilidad de la obligatoriedad de bajarse de la bici, a la vez que se abandona la clásica señalización de tráfico por una nueva familia de señales más apropiadas para el tránsito ciclista.
En esta señalización se ha incorporado también la calle San Jacinto, en cumplimiento del acuerdo alcanzado en la Junta Municipal del Distrito Triana sin ningún voto en contra para establecer que en el tramo peatonal sea obligatorio descender de la bicicleta y circular a pie en horario comercial y de gran afluencia de personas con el objetivo de mejorar la convivencia entre peatones y ciclistas y mejorar la seguridad en el uso de este espacio público peatonal.