Madrid atrae empresas de todos los territorios, y de manera permanente, no sólo con motivo de la crisis independentista catalana de los últimos meses. Sacyr, uno de los grandes grupos constructores españoles cotizados en Bolsa, ha decidido trasladar la sede de su histórica filial constructora andaluza Prinur de Sevilla a Madrid. Al mismo tiempo, la ha renombrado tras 26 años de existencia como Sacyr Infraestructuras.
Fuentes de Sacyr explican a este diario que este cambio se debe a una “reestructuración societaria que persigue simplificar el mapa societario de la compañía”. Sobre la nueva denominación y rumbo futuro, la empresa tiene planes ambiciosos para la ya extinta Prinur: “Sacyr Infraestructuras será la cabecera del negocio de construcción de Sacyr en España. Prinur, gracias a sus excelentes clasificaciones y experiencia, es el núcleo sobre el que pivota esta reestructuración. Sacyr Infraestructuras mantendrá sus oficinas y personal en Andalucía, sin cambios respecto de la situación actual”, añaden esas fuentes.
Prinur tiene oficinas en Sevilla y empleaba a 52 personas a final de 2016, 20 de ellas fijas. Su cifra de negocio se derrumbó un 41% el año pasado, hasta 14,7 millones. No obstante, ha logrado mantenerse en beneficios: ganó 2,7 millones, frente a 4,8 en 2015.
Cartera
Además, Prinur señala en sus últimas cuentas anuales: “El nivel de crecimiento queda garantizado por la cartera de construcción”, que era de 52,8 millones a cierre del pasado año. Había descendido desde 63 millones a final de 2015. La totalidad de esa cartera se corresponde con obras en Andalucía, incluyendo la presa de Alcolea o un tramo de la autovía A-32 en Jaén. De esa cifra, 10,3 millones corresponden a proyectos con la Junta de Andalucía, y el resto con el Gobierno central.
La gestión desde Madrid de compañías constructoras con fuerte implantación regional no es exclusivo de Sacyr. Grupo Sando, una de las grandes constructoras regionales originaria de Málaga, tiene su sede en la capital de España.