Una patrulla de agentes del Grupo de Investigación y Protección (GIP) de la Policía Local de Málaga ha detenido a un total de seis mujeres en dos actuaciones llevadas a cabo en menos de una hora, concretamente en la franja horaria que va de las 15.00 a las 16.00 horas del martes 1 de noviembre, tras sorprenderlas perpetrando hurtos a turistas en el centro de la ciudad.
La forma de operar fue similar en ambos casos. Se trata de mujeres especializadas en sustraer efectos al descuido, sobre todo a turistas extranjeros que visitan la ciudad, a los que, tras fijar como objetivo, comienzan a seguir en pareja. Luego, utilizando una prenda de ropa, un mapa de gran tamaño o similar para ocultar la acción, mientras una de ellas ejecuta el hurto, normalmente abriendo las cremalleras o sistemas de cierre de bolsos o mochilas que las víctimas portan en el costado o espalda con la intención de sustraer objetos de su interior.
La primera intervención tuvo lugar sobre las 15.15 horas, cuando agentes del GIP de la Policía Local de Málaga especializados en este tipo de intervenciones, prestando servicio de paisano y en prevención de hechos delictivos, detectaron a un grupo formado por cuatro mujeres con edades comprendidas entre los 18 y los 42 años a las que conocían a raíz de servicios anteriores motivados por hurtos, tipo delictivo en el que son reincidentes.
Como es habitual, las mujeres caminaban juntas, cambiando de dirección continuamente y realizándose señales entre las mismas en las que señalaban a víctimas propicias, a las que seguían de forma sigilosa, según han indicado desde la Policía Local en un comunicado.
En un momento dado, se acercaron a un varón de origen asiático que caminaba por calle Santa María, abriendo una de las mujeres la cremallera de la riñonera que portaba a su espalda a la vez que tapaba la acción con un mapa de gran tamaño que portaba en la otra mano, haciendo lo propio otra de las partícipes con otro mapa similar.
Mientras las otras dos trataban de ocultar igualmente la acción y realizaban labores de vigilancia, percatándose una de ellas de la presencia policial, ya que, aunque se encontraban de paisano llevando a cabo un discreto seguimiento, conocían a los policías locales con motivo de que las habían sorprendido ejecutando hechos similares en ocasiones anteriores.
Tras ser avisada, la autora material del hurto soltó lo que había cogido del interior de la riñonera, retirándose del turista. En ese momento los agentes procedieron a interceptar a las cuatro mujeres, mientras otra unidad de la Policía Local de Málaga, en este caso uniformada, que se acercó en apoyo, procedió a identificar a la víctima. Ahí comprobó que tenía la cremallera abierta, portando en el interior 200 euros, un teléfono móvil valorado en más de 900 euros y una batería externa, entre otras pertenencias.
Los policías locales requirieron la presencia de una compañera femenina para cachear a las individuas, siéndoles intervenidos un total de 100,34 euros por su posible procedencia ilícita.
Y minutos después... otras dos
Tan solo unos 35 minutos después, los mismos agentes localizaron a otras dos mujeres, en este caso de 20 y 45 años, igualmente conocidas por actuaciones policiales anteriores motivadas por hurtos, advirtiendo cómo, al igual que en el caso anterior, comenzaban a seguir a un hombre que tenía un bolso colgado, utilizando una de ellas una prenda de ropa para ocultar su mano e introducirla dentro, mientras la otra, en actitud vigilante, se pegaba a ella haciendo de pantalla para ocultar la acción.
Al igual que en el caso anterior, esta última advirtió la presencia policial tras reconocer a los agentes, alertando a su compañera, que cesó en la acción y se acercó rápidamente a una jardinera para tirar lo que ya había sustraído del interior del bolso, concretamente dos tarjetas bancarias, 100 euros, un permiso de conducir estadounidense y una tarjeta de acceso a un crucero, siendo todos los efectos recuperados por los agentes, que comprobaron que la víctima también portaba en el interior del bolso un móvil similar al anterior con el que no llegaron a hacerse gracias a la rápida actuación policial.
Tras ser interceptadas, la policía local se acercó nuevamente al lugar para efectuarles un cacheo en el que les localizó e intervino un total de 62 euros y 20 dólares canadienses.
En cuanto a la víctima, fue trasladada a la Comisaría Provincial de Policía Nacional para presentar la correspondiente denuncia, siéndole entregados la totalidad de efectos sustraídos. En ambas actuaciones, los policías locales procedieron a la detención de las implicadas y a su traslado a dependencias policiales, para, posteriormente, ser puestas a disposición judicial.
Por último, han indicado que las detenidas en ambas intervenciones poseen numerosos antecedentes policiales por hechos de idénticas características, habiendo sido arrestadas con anterioridad por estos mismos agentes, constándoles en vigor averiguaciones de domicilio y paradero debido a que no suelen aportar sus domicilios reales para dificultar su posterior localización.
