El
Unicaja Málaga confirmó su presencia en la siguiente ronda de la
Basketball Champions League. Es cierto que las matemáticas todavía deben confirmarlo al 100%, pero el contundente triunfo ante un débil Strasbourg (91.62) dejó claro que este equipo es uno de los principales candidatos a llevarse el título (sin no el principal).
Lo cierto es que
pocos equipos podrían plantarle cara al Unicaja en esta competición, como se está viendo, y el SIG Estrasburgo no fue la excepción.
Desde el inicio, el equipo dirigido por Ibon Navarro
mostró un juego arrollador, una mezcla de baloncesto imperial y defensas impenetrables que se repetirían en los vídeos de los amantes del deporte. A pesar de no apretar más allá de sus posibilidades, el Unicaja se impuso con autoridad, dejando claro que la
clasificación a la próxima fase era solo cuestión de tiempo.
El Unicaja
no necesitó extravagancias para dominar desde el principio. Una actividad de manos casi perfecta y un Barreiro inspirado acabaron con las esperanzas del Estrasburgo desde el primer cuarto. A pesar de algunas faltas tempranas, el equipo mantuvo la calma y el control del juego.
Carter y Kalinoski, con una actuación destacada, ampliaron la ventaja, dejando a
Cavaliere e
Invernizzi intentando maquillar el resultado. El Unicaja continuó sin sudar en exceso, aniquilando al rival con contraataques letales. La victoria era evidente, y los jugadores aprovecharon para ganar más rodaje.
Plácido final
El
último cuarto no tuvo historia. Ni los múltiples tiempos muertos del entrenador rival pudieron frenar la avalancha del Unicaja, que cerró el partido con un contundente 91-62. La grandeza de este equipo se destacó aún más cuando se supo que tanto el Bonn como el UCAM Murcia, también con un récord de 3-0 en Europa hasta ese momento, perdieron sus respectivos partidos.
La victoria del Unicaja
resonó como un eco de grandeza en Europa, un equipo inconmensurable que sigue dejando su huella en la Basketball Champions League. Con la clasificación a los cuartos de final casi asegurada, los aficionados celebraron no solo el triunfo sino la magnitud de un equipo que parece destinado a hacer historia.
La confirmación matemática de la clasificación
queda pendiente del resultado del Cholet - Tofas Bursa del miércoles. Sin embargo, con cuatro triunfos en la clasificación, el Unicaja ya estáen una posición sólida. Solo la victoria de los turcos aseguraría el pase a los cuartos de final, dejando a los franceses con una única victoria