Las lluvias de la pasada semana llegaron, nunca mejor dicho, como 'agua de mayo'. Tras un invierno especialmente caluroso y seco, las últimas precipitaciones caídas en la provincia tampoco han traído el agua necesaria a Málaga y mantienen por debajo los pantanos respecto a las mismas fechas del año pasado.
Así las cosas, la preocupación por un posible periodo de sequía es un hecho ya con el aumento de la demanda de agua a las puertas del verano. Los tres embalses que abastecen la capital malagueña (Conde del Guadalhorce, Guadalteba y Guadalhorce) apenas han crecido 3 hectómetros cúbicos con estas recientes lluvias. Este volumen de agua acumulada no alcanza la cifra de consumo que necesita Málaga capital para un mes (5 hm cúbicos).
Según datos facilitados por la red Hidrosur, dependiente de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, los embalses del sistema del Guadalhorce sumaban ayer un total de 203 hectómetros cúbicos, frente a los 200’7 del pasado 8 de mayo y sigue manteniéndose cerca de la situación de prealerta de sequía, que se sitúa en los 198 hm3.
Pese a que estas lluvias han sido muy beneficiosas para los cultivos de primavera y verano del campo malagueño, la mayoría de los siete pantanos de la provincia apenas han aumentado su capacidad. El que más se ha beneficiado de este frente lluvioso ha sido el de la Concepción, que abastece a la Costa del Sol y ha crecido sus reservas casi un 35 por ciento más (13 hm cúbicos), lo que garantiza el abastecimiento para este verano en estos municipios turísticos.
El déficit hídrico, por tanto, sigue siendo preocupante en este año hidrológico y pese a que ha subido el nivel total de los embalses 17,2 hectómetros cúbicos (de 328,6 a 345,8), pero muy lejos del volumen de agua acumulada del año pasado en estas mismas fechas (468,5 ), lo que representa casi 123 hectómetros cúbicos menos, es decir, la cantidad de agua que la capital y la provincia consume en un año.
Según la web de la Junta de Andalucía, Málaga se sitúa la cola de agua embalsada en las ocho provincias andaluzas, con los pantanos a un 55,36 por ciento de su capacidad, y sólo por delante de Almería (9,66%). Huelva, con un 84, 06 por ciento es la que tiene un mayor porcentaje.
Según la Aemet, las lluvias entre octubre de 2015 y mayo 2016 alcanza los 280 litros por metro cuadrado, muy por debajo de la media histórica de 501.
El pantano de Conde del Gualhorce es el que más ha aumentado con estas lluvias su capacidad, un 5 por ciento, detrás del de la Concepción.