Málaga irá a la caza del mosquito ‘aedes caspius’ que trae de cabeza a los vecinos de Gualdamar, Sacaba Beach y Parque Litoral. Se actuará no solo contra las larvas, sino también directamente atacando a los adultos. Tras la negativa de la Junta a cofinanciar un plan de acción para controlar los insectos en el paraje, el ayuntaminto emprende la batalla en solitario, con un presupuesto de 18.000 euros que permitirá actuar tres veces en el paraje natural de mayo a septiembre. En las zonas exteriores limítrofes al enclave se echará mano de insecticida a través de carretillas y cañones y se colocarán hasta 16 trampas que succionan a los molestos insectos, no tan virulentos como el mosquito ‘tigre’ pero con una picadura más agresiva que el común.
Un anuncio que se solapó este mismo jueves con la reunión que el delegado de Medio Ambiente en Málaga, Adolfo Moreno, mantuvo con vecinos afectados. Un encuentro donde insistió en que la competencia en el control de plagas es municipal, pero recordó su colaboración en acabar con ellos, “fue la Junta la que llamó a técnicos de Huelva para que asesoraran”. Avanzó que ya se ha realizado el desagüe del margen derecho del río, se procederá al izquierdo, así como el desbroce de ambos o minizar zonas encharcadas.
