La Policía Nacional ha desarticulado una trama de narcotraficantes dedicada al tráfico internacional de marihuana compuesta por varias bandas asentadas en Málaga, Granada, Sevilla y Cádiz, actuación en la que han sido arrestadas 39 personas de ocho nacionalidades.
La investigación, que comenzó en abril del pasado año en Torremolinos, ha propiciado una quincena de registros y ha permitido la intervención de 66 kilos de marihuana, de 2.267 plantas de cannabis sativa y de 36.215 euros en efectivo, así como el desmantelamiento de nueve invernaderos, según ha informado hoy la Policía en un comunicado.
Según las pesquisas, la rama principal de la organización, que estaba liderada por un hombre de nacionalidad holandesa, hacía de intermediaria entre las distintas bandas asentadas en las provincias andaluzas -productoras y suministradoras del estupefaciente- y otras de compradores e intermediarios.
Estas últimas se encargaban de su adquisición y distribución en los distintos países europeos, principalmente en Alemania, Holanda y Reino Unido.
En la primera fase de la operación, desarrollada el pasado enero, fueron detenidas nueve personas e intervenidos 21 kilos de marihuana, tres vehículos y 10.950 euros, entre otros efectos.
La segunda etapa de la investigación se llevó a cabo a principios de febrero con la detención de los dieciocho integrantes de otra de las ramas de la red, la intervención de 667 plantas de cannabis sativa y 25 kilos de marihuana envasada, así como de 25.265 euros en efectivo.
En la tercera y última fase de la actuación fue desarticulada otra de las ramas de la trama principal, con la detención de doce personas, ocho registros y la aprehensión de 20 kilos de marihuana envasada, así como de 1.600 plantas, una pistola de fogueo y un vehículo.
La rama principal de la estructura desmantelada adquiría droga a los otros grupos criminales radicados en las provincias de Málaga, Sevilla, Granada y Cádiz, que cultivaban, elaboraban y preparaban la sustancia estupefaciente para su posterior venta y consumo en Europa.
Entre los arrestados está el principal investigado, un hombre de 57 años y nacionalidad holandesa, que hacía funciones tanto de comprador como de intermediario entre los cultivadores y suministradores del estupefaciente y los distribuidores en Europa.
Los 39 detenidos por su supuesta implicación en los delitos de tráfico de drogas y pertenencia a grupo criminal tienen entre 22 y 63 años y son de nacionalidades española, inglesa, holandesa, polaca, marroquí, alemana, ucraniana y bielorrusa.
