El técnico del Málaga, José Miguel González 'Míchel', afirmó que tienen que jugar el partido del sábado ante el Deportivo, en Riazor, como si estuvieran "en peligro" y que sus jugadores ya no le "engañan" porque sabe "lo que pueden dar de sí", con lo que lanzó la advertencia de que "se anden con cuidado".
Míchel consideró este jueves en rueda de prensa que el Deportivo es "un equipo que estaba en dificultades más por resultados que por juego y mejoró", aunque parece que "de nuevo están en una dinámica más negativa", al ser decimosextos con 28 puntos, cinco menos que el Málaga, decimocuarto con 33 -a once del descenso-.
"En cuatro días hemos conseguido cuajar sobre el campo eso que teníamos en la cabeza. La permanencia no es matemática, pero es moral, ya que tenemos una distancia muy grande" respecto a los tres últimos, subrayó el entrenador malaguista.
El madrileño precisó que "todo eso que se hablaba del calendario" difícil que tenía el Málaga, algo que recordó "con lo que no estaba de acuerdo", al final le "ha dado la razón", si bien no quiere que "eso sea una excusa para decir que ya" han "hecho la temporada".
Para Míchel, el equipo tiene que "seguir intentando devolver toda la confianza que habían puesto" en ellos la afición blanquiazul, y añadió que el cambio de la situación, con dos victorias consecutivas ante el Sporting y el Barcelona, se ha debido sobre todo "al estado mental de seguridad y tranquilidad que ha ido tomando el cuerpo", y la implicación de su plantilla.
Sobre el delantero venezolano Adalberto Peñaranda, lesionado esta semana con un problema muscular, indicó que el equipo técnico le hizo "una llamada de atención y reaccionó muy bien", hasta el punto de que "tuvo minutos" contra el Barcelona, pero esa "intensidad ha hecho que se lesione por un esfuerzo mayor".
Con la permanencia casi asegurada, Míchel confirmó que junto con los dirigentes del club ya han comenzado a planificar la próxima temporada y a "construir el año que viene", con lo que estas siete jornadas que restan para concluir el campeonato "se unen a las del año que viene", en el que se la juegan "todos, incluido el entrenador".
"Tenemos todo planificado para el año que viene", aseguró el entrenador malaguista, que subrayó que el director deportivo, Francesc Arnau, "sabe" sus "ideas" y que él también tiene que estar "a expensas" de lo que le diga su "jefe", ya que desde su llegada al cargo él ha "participado en la planificación, pero ahora empiezan las negociaciones".