La convocatoria de huelga en la plantilla del metro de Málaga, tras cuatro años de “pésimas condiciones laborales y conflictos con la empresa” con grave “repercusión familiar y en la salud de los trabajadores”, es ya una realidad si “la Junta de Andalucía y Metro Málaga no hacen nada por evitarla”.
Así lo aseguró la secretaria general de FSC de CCOO Málaga, Carolina Ortiz, recordando que “ha transcurrido un año desde la primera movilización en Metro Málaga, en la que denunciábamos la discriminación salarial y las pésimas condiciones laborales, nacidas de un convenio, que se cerró antes de la entrada de las 84 personas, operadores y conductores, con la participación exclusiva de los puestos de dirección. En mayo de 2017 se inició la negociación de un nuevo convenio, intentando acercar posturas con el objetivo de que las condiciones laborales en Málaga dejaran de ser las peores entre todos los operadores del país”.
“Recientemente solicitamos información sobre los 500 mil euros que están destinados en el presupuesto para salarios y, tras justificaciones poco claras, la Inspección de Trabajo ha resuelto que Metro Málaga debe hacer entrega de la documentación de liquidaciones sociales pero, hasta la fecha, no hemos tenido acceso a la documentación. Este hecho, sumado a la denuncia por parte de Metro Málaga, que considera la convocatoria de huelga desproporcionada e injustificada, y la ruptura de la mesa negociadora, nos llevo a realizar una concentración el pasado lunes ante la Delegación de la Junta de Andalucía, quien como garante del servicio a la ciudadanía debe velar por la aplicación de unas clausulas sociales que recientemente firmó para la prestación de servicios públicos y, además, forma parte de la sociedad con un 23 por ciento de Metro Málaga” manifestó Ortiz, quien afirmó que “la empresa pretende imponer servicios mínimos por encima del 25 por ciento, que es el máximo establecido por normativa andaluza”.
Por su parte, el miembro del comité de empresa de Metro Málaga, de CCOO, Juan Vicente Pomares lamentó que “las reuniones para la negociación del convenio fueran bochornosas, hasta su ruptura por la falta de respeto a los representantes de la plantilla”. Asimismo, Pomares denunció que “la conciliación familiar es imposible con 722 turnos y 100 horas de trabajo más al año que el resto del personal ferroviario del país, y jornadas de más de 10 horas con cortos descansos de 30 minutos”.
“Queremos poder disfrutar de algunos finas de semana con nuestras familias y que las vacaciones sean negociadas y no impuestas. Por esta situación están afectados 84 miembros de la plantilla, de los 130 que la componen”.
Movilizaciones y paros
CCOO mantuvo este miércoles una reunión con Francisco Fernández España, Delegado de la Junta de Andalucía, en la que éste se comprometió en mediar para intentar que se llegue a un acuerdo “buscando soluciones razonables”. No obstante, las siguientes movilizaciones y paros se mantienen por el momento:el lunes 12 de marzo está convocado un paro de 6’30 a 15 horas y a las 11,30 horas una concentración ante el metro de Perchel con el apoyo ciudadano; el viernes 23 de marzo convocan un paro de 15 a 02,30 horas; domingo 25 marzo: paro de 13,30 a 03,30 horas de la madrugada; el lunes 26 de marzo habrá un paro de 13,30 a 03’30 horas del 27 de marzo; el miércoles 28 de marzo está convocado un paro desde las 14 horas del día 28 a las 03,15 horas del 31 de marzo.