La Policía Local de Málaga ha desarticulado una banda de ladrones que abrían coches sin forzarlos, lo cual evidencia que habían copiado los códigos de las llaves a través de algún sistema de radiofrecuencia. Así, se ha detenido a cuatro jóvenes, uno de 19 años y tres menores, de 15, 16 y 17 años, como presuntos autores de un delito de robo en vehículos.
Los hechos tuvieron lugar sobre las 05.10 horas del 2 de febrero en la calle Platero Francisco Vázquez, por donde patrullaba en vehículo policial una dotación de agentes de la Policía Local de Málaga. Así, observaron, a la entrada hacia el bulevar Presidente Adolfo Suárez, a cinco individuos que parecían estar robando en el interior de vehículos estacionados, entrando cuatro de ellos en el interior de un coche mientras el quinto lo hacía en otro cercano.
Al percatarse de la presencia policial, los jóvenes emprendieron la huida corriendo y se deshicieron de varios objetos sustraídos que tiraron al suelo. Así, comenzaron a ser perseguidos a pie por uno de los policías locales mientras su compañero hacía lo propio desde el vehículo patrulla.
Tras una persecución de alrededor de un kilómetro, el agente que los perseguía a pie terminó por interceptar a uno de los huidos, para lo que previamente tuvo que saltar un muro de unos dos metros de altura, según ha informado la Policía Local en un comunicado.
Acto seguido, el policía local que los perseguía desde el vehículo logró interceptar a otros tres implicados en los hechos, logrando huir uno de ellos, del que pudieron apreciar vestimenta y características. Ante los hechos, los policías locales procedieron a la detención de los cuatro jóvenes y a su traslado a dependencias policiales, siendo, posteriormente, puestos a disposición judicial.
Los policías locales volvieron al lugar de los hechos, comprobando que había un total de seis vehículos abiertos, todos ellos del mismo grupo automovilístico, y concretamente cinco de la misma marca, encontrándose con el interior revuelto, la documentación tirada, además de dos de ellos con las pantallas LCD fracturadas, presuntamente al intentar sustraerlas. Otro tenía una caja de herramientas forzada y uno más con un extintor que al parecer pretendían sustraer y del que se hizo entrega en dependencias policiales.
La técnica empleada que se suele utilizar por este tipo de bandas para robar en coches sin dejar rastro ni haber forzado las cerraduras o ventanas es la de captar la frecuencia del mando a distancia en el momento en que cada víctima cierra las puertas del vehículo tras aparcar.
Posteriormente, han precisado desde la Policía Local, con una llave de la misma marca duplican la original, accediendo al vehículo y apoderándose de los objetos de valor de su interior, de modo que los propietarios cierran su vehículo y cuando regresan se encuentran que no están sus pertenencias a pesar de que el coche no presenta signos de haber sido forzado.