El Ejército ruso continuó en las últimas 24 horas su ofensiva en el este y sur de Ucrania, aunque con menos ataques que en días anteriores, mientras prosigue el asedio a la planta siderúrgica de Azovstal, en la portuaria ciudad de Mariúpol, que tiene prácticamente controlada.
"El enemigo ruso continúa realizando operaciones ofensivas en la Zona Operacional del Este para derrotar a las Fuerzas Conjuntas (ucranianas), establecer el control total sobre el territorio de las regiones de Donetsk y Lugansk y mantener la ruta terrestre con la Crimea ocupada", aseguró el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania, según las agencias locales.
Donetsk y Lugansk son dos regiones prorrusas que declararon su independencia como repúblicas y fueron reconocidas por Moscú días antes del inicio de la invasión del país.
La estrategia del Klemlin en Ucrania en los últimos días pasa por tratar de controlar ambas regiones desde la vecina Járkov, que está sufriendo fuertes bombardeos, especialmente su capital y la ciudad de Izium.
Se trata de establecer un corredor entre esta zona, conocida como el Donbás, y la península de Crimea, en el mar Negro, ocupada por los rusos desde 2014.
Según el parte castrense, en la región de Jersón hubo explosiones y bombardeos. Las tropas rusas intentan tomar el control de pueblos y aldeas recurriendo a amenazas y secuestros. La situación en la región es difícil y tensa.
En la región de Lugansk, la situación sigue siendo tensa. Durante el día, Sievierodonetsk, Lysychansk, Hirske y Pryvillia fueron bombardeados. En cada una de estas ciudades y pueblos hay daños en casas y edificios agrícolas, sin que se produjeran víctimas civiles.
Y en Donetsk hubo bombardeos a lo largo de toda la línea del frente: las tropas rusas despliegan lanzacohetes múltiples Grad, artillería, morteros, aviones y misiles. En la noche del jueves 28 de abril hubo un ataque con misiles en las afueras de Kramatorsk.
Sin embargo, los "invasores rusos no realizaron operaciones ofensivas activas en la dirección de Izium (en la región de Járkov). Sus principales esfuerzos se centraron en realizar reconocimientos, identificar las posiciones defensivas ucranianas y su destrucción por fuego de artillería".
Izium había sido una zona especialmente castigada por la ofensiva rusa en las últimas jornadas.
Las fuerzas de ocupación rusas continúan el asedio de las unidades ucranianas en Mariupol, alrededor de la planta de Azovstal, donde según las autoridades, se refugian medio millar de soldados del regimiento de Azov, que forma parte del ejército ucraniano, y un millar de civiles.
Por otra parte, el ejército ruso, que inició la invasión de Ucrania el pasado 24 de febrero, había dejado de bombardear la ciudad de Kiev y sus alrededores en las últimas semanas, pero este jueves lo hizo de nuevo, aunque no causó víctimas mortales.
En los territorios "temporalmente ocupados, las autoridades de ocupación rusas continúan restringiendo el movimiento y deteniendo a los residentes locales y bloqueando los bienes de ayuda humanitaria que discurren por el territorio de Ucrania", subrayan los militares.
En el parte de guerra se denuncia además que "los ocupantes rusos están robando a los agricultores locales. Por ejemplo, se robaron más de 60 toneladas de trigo de una instalación agrícola en la ciudad de Kamianka-Dniprovska, junto con los camiones que había en la zona".
Por otra parte y según Kiev, los ucranianos derribaron quince objetivos aéreos durante el último día, incluido un avión de combate, cinco misiles de crucero y nueve drones.