La difusión de una conversación grabada entre el futbolista y el mandatario realista ha tenido una enorme repercusión en la capital guipuzcoana, con división de opiniones entre los partidarios de seguir adelante con esta cuestión y los que consideran que en poco o nada va a beneficiar a la Real.
Badiola, en declaraciones realizadas a la radio-televisión pública vasca desde China, donde está en viaje de negocios privado, se ha mostrado satisfecho por el eco que ha tenido su denuncia y ha dicho que de esta forma se visualiza “la suciedad que hay en el fútbol”, al tiempo que ha pedido al reelegido presidente de la Federación Española Angel María Villar que investigue los hechos por “una cuestión democrática”.
En San Sebastián, el portavoz realista Luis María Antoñana, abogado de profesión, ha declarado la disposición del club a “actuar de parte si la Federación no lo hiciera de oficio” ante la gravedad del contenido de la conversación entre Badiola y Jesuli.
Antoñana se ha mostrado partidario de llegar hasta el final en la investigación de lo ocurrido en la última jornada de la pasada Liga porque estos hechos, en su opinión, “atentan contra el decoro y el buen orden deportivo”.
Este caso se une a una denuncia anterior por el presunto intento de compra del partido Sevilla Atlético -Málaga, en la que la Real esgrimió una supuesta grabación entre el ex presidente del Real Madrid, Lorenzo Sanz, padre del actual presidente del Málaga, y un agente FIFA.
La ‘crónica’ del partido
La caída de una portería del estadio de La Rosaleda, antes de que concluyera el partido, fue de lo más recordado del Málaga-Tenerife de la última jornada de la pasada temporada en Segunda División, encuentro que transcurrió sin que, aparentemente, hubieran lances que hicieran sospechar un amaño. El Málaga ganó 2-1.
El partido era de la máxima importancia para el Málaga, pues, si ganaba, ascendía. El estadio de La Rosaleda se llenó en casi sus treinta mil localidades de aficionados deseosos de ver ganar a su equipo y cantar el alirón, y para ello había que superar a un Tenerife que se plantó en Málaga situado en la mitad de la tabla y sin nada en juego.
En ese partido, arbitrado por el colegiado castellano-manchego Alfonso Pino Zamorano, el Málaga se adelantó en el marcador con un tanto de Hidalgo y logró poner el 2-0 gracias a un penalti por manos de un defensor del Tenerife, una jugada que no despertó ninguna duda de que hubiera sido con la intención de que el equipo local saliera favorecido.
Ya en los minutos de prolongación hubo una invasión del campo , lo que produjo la caída de una portería y que Pino Zamorano suspendiera el choque hasta que se volviera a colocar la meta.
Sobre la victoria del Málaga el pasado 24 de mayo en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante el Sevilla Atlético (0-1), el asunto pasó a los comités de Competición y Apelación de la Real Federación Española de Fútbol, organismos que no encontraron pruebas para sancionar los hechos, por lo que la competición transcurrió hasta la última jornada con los habituales comentarios sobre las primas a terceros por ganar, pero nunca por perder.
La Federación Española de Fútbol (RFEF) no ha recibido ninguna denuncia sobre un posible soborno a los jugadores del Tenerife en el citado partido.