Así lo han expuesto los fiscales anticorrupción durante la vista de medidas cautelares celebrada la mañana de ayer en los juzgados de Vía Alemania de Palma. El juez le ha retirado el pasaporte hasta el lunes a las 10.00 horas, cuando se pronunciará sobre la petición del ministerio fiscal, han informado a Efe fuentes jurídicas.
Además de la fianza personal, los fiscales piden que se prohíba al ex presidente salir de España y la retirada el pasaporte, así como que comparezca cada quince días en el juzgado.
La fiscalía también ha solicitado diversas medidas cautelares para su cuñado Fernando Areal, ex tesorero del PP balear, pero no su prisión provisional. En concreto, requiere la prohibición de salida de España, la reiterada del pasaporte y su comparecencia quincenal.
La abogada de la acusación particular ejercida en nombre de la comunidad autónoma de Baleares, María Ángeles Berrocal, se ha adherido a la petición del ministerio fiscal. En los más de 50 folios de escrito, la Fiscalía considera que los delitos que se le imputan a Matas suman penas de hasta 24 años de cárcel y no 18, como en un principio han informado fuentes jurídicas.
Ante esta elevada condena y teniendo en cuenta que Matas reside en Estados Unidos, la Fiscalía estima que existe peligro de huida, por lo que ayer mismo el juez instructor, José Castro, le ha retirado cautelarmente el pasaporte. El ministerio fiscal alega también para pedir la prisión bajo fianza que podría producirse una alteración de pruebas.
Durante la vista, el fiscal Pedro Horrach señaló que la fianza que ha pedido no es superior debido a la buena actuación profesional del abogado de Madrid contratado por Matas, Manuel Ollé. En relación con la petición de los fiscales anticorrupción, la defensa de Matas objetó que no existe dicho riesgo de fuga ya que, a pesar de la presión que ha sufrido en los últimos meses, el ex mandatario autonómico ha comparecido finalmente esta semana ante el juez.
Además, la defensa ha sostenido que quitarle el pasaporte ya le inhabilita para trabajar en ciertos países, por lo que el riesgo de fuga es todavía menor.
Matas y su cuñado han llegado a las 10.35 horas a los juzgados de Palma y han recibido nuevamente gritos de desaprobación por parte de un grupo de ciudadanos.
“¡Ladrones, devolved el dinero!”, les han gritado algunas personas que se asomaban a las ventanas de la calle por donde han accedido a los juzgados, y donde la policía había establecido un dispositivo para evitar la concentración de personas a las puertas del edificio.