Fani tocó tierra a primera hora del viernes en la región india de Odisha con vientos de hasta 205 kilómetros por hora y como ciclón "extremadamente sever
El ciclón Fani causó de madrugada daños materiales a su paso por el estado oriental indio de Bengala y esta mañana llegó a Bangladesh tras debilitarse a una "depresión severa", mientras las autoridades de ambos países han contabilizado once muertos por sus efectos.
Fani tocó tierra a primera hora del viernes en la región india de Odisha con vientos de hasta 205 kilómetros por hora y en forma de ciclón "extremadamente severo", causando al menos siete muertos en el estado, informó hoy a Efe una fuente de la sala de control de la Fuerza Nacional de Respuesta a Desastres (NDRF).
Tras dejar las líneas eléctricas y de telecomunicaciones caídas, vuelos y trenes cancelados e importantes daños materiales, "Fani se alejó a última hora de ayer y ahora las tareas de rescate están en marcha", precisó la fuente, al agregar que los más de un millón de evacuados están regresando "poco a poco" a sus casas.
Desde Odisha se trasladó esta madrugada como "ciclón" a la vecina Bengala, donde tuvo un impacto "muy leve" y sólo causó daños a algunas líneas eléctricas y viviendas, sin que se produjeran víctimas, confirmó a Efe el secretario de Gestión de Desastres de Bengala, Malay Kumar De.
La fuente detalló que el aeropuerto de la capital regional, Calcuta, ya ha reabierto tras moverse Fani a Bangladesh.
A ese país arribó tras debilitarse todavía más, a "depresión severa", y causó al menos tres muertos por el derrumbe de viviendas, dijo a Efe un portavoz de la sala de control del Ministerio de Gestión de Desastres bangladesí, Benzir Ahmed.
Las autoridades bangladesíes ya habían confirmado ayer un deceso por los efectos de Fani, antes de su llegada al país, lo que eleva a cuatro los fallecidos en ese país asiático.
En el distrito de Sathkhira, unas 600 casas y 2.000 hectáreas de terreno agrícola resultaron dañadas, según aseguró a Efe el jefe de la Administración local, Mostafa Kamal.
La costa india suele sufrir el paso de ciclones, uno de los últimos en octubre del año pasado, el "muy severo" Titli, que dejó unos sesenta muertos a su paso por el estado de Odisha, también el más golpeado por Fani.