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Provincia de Cádiz

Una estrategia para hacer frente a la rumorología racista

El programa Stop Rumores de la ONG Andalucía Acoge en la provincia de Cádiz, cuenta con el apoyo de AMPAS, asociaciones vecinales y entidades

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  • Balance de la campaña Stop Rumores -

En Jerez circula la noticia de que el alumnado inmigrante residente en la localidad recibe y tiene más facilidades para recibir ayudas escolares como las otorgadas para el aula matinal o el comedor escolar. Se trata de una falsedad difundida por las redes sociales y son muchos los que le han dado credibilidad. Son los rumores falsos, medias verdades que a menudo pesan sobre la población inmigrante y dificultan la convivencia.

La réplica a este bulo ha llegado desde Stop Rumores, un programa que tiene en funcionamiento la organización Andalucía Acoge y que tiene un número elevado de colaboradores en la provincia.  Jerez es una de las localidades con más adeptos al proyecto. La asociación Ceain es la responsable del programa en Jerez y son numerosos las asociaciones de padres y madres de alumnos que se han adherido y han organizado charlas para conocerlo y difundirlo entre el alumnado, como es el IES Seritum, el ampa del Isabel la Católica o el CEIP Levante, entre otros.

  El Colegio Oficial de Trabajadores Sociales de Cádiz.El Ayuntamiento de Jerez también se ha sumado a la iniciativa o o el equipo de fútbol Alma de África.


Esta batalla tiene más aliados en la provincia. Rota, El Puerto de Santa María, Algeciras, Los Barrios o La Línea son otras localidades gaditanas que se han sumado.

Andalucía Acoge puso en marcha en 2014 el proyecto Stop Rumores.   Los inmigrantes quitan el trabajo a los españoles. Los inmigrantes saturan los servicios sanitarios. Los inmigrantes copan las ayudas sociales. Estos son tres de los mensajes falsos a los que este programa hace frente.

La idea central del proyecto es promover la creación de una "Agencia Antirumor" para combatir los rumores negativos e inciertos que dificultan la convivencia, especialmente los relacionados con las personas inmigrantes.

Este proyecto está en marcha en otras ciudades españolas y cuenta con la financiación del Ministerio de Empleo y Seguridad Social y está cofinanciado por el Fondo Europeo de Integración.

Andalucía Acoge busca promover una ciudadanía activa formada e informada para combatir rumores a través de la sensibilización en el espacio de convivencia y el trabajo en red y con convenios de colaboración con las entidades implicadas.

Uno de los aspectos más importantes  es la realización de acciones formativas que permitan dar herramientas e información a los 'agentes antirumor', personas que ayudarán a combatir los rumores y estereotipos en sus entornos locales y cercanos.

"Son los vasos capilares de la estrategia a desarrollar en barrios, pueblos y ciudades de Andalucía y Melilla presentando una información objetiva y argumentada frente a las falsas afirmaciones", según Andalucía Acoge.

El proyecto cuenta con una página web propia, que dispone de un espacio para avisar de nuevos rumores para activar un dispositivo de respuesta ante el mismo.

“Lo que hacemos es buscar datos objetivos que muestren la realidad de afirmaciones que tienen una base irreal, como es el caso de la saturación de los servicios sanitarios o que baja el nivel educativo del alumnado por culpa de los inmigrantes”, asegura Ángel Madero, responsable en Andalucía del programa. El Ministerio del Interior, las consejerías de Educación y Sanidad son algunas de las fuentes a las que los ‘acoge’ recurren para disponer de datos objetivos para hacer frente a la rumorología racista.

Con estos datos se elaboran dípticos informativos que la red de agentes antirumores  lanza a las redes sociales para que la sociedad tenga esta información.  Los agentes antirumores son claves en este programa. Son ellos los que detectan los falsos rumores y los que los combaten difundiendo las replicas en las redes sociales y en sus grupos de whatsapp. “Cualquier persona puede ser un agente antirumor, todo aquel que dé un paso adelante y diga que no va  a permitir que en su entorno se lancen este tipo de rumores. Nosotros les damos las herramientas, esos datos objetivos que les van a ayudar a desmontar los rumores. Los trabajamos de manera que se puedan compartir por las redes sociales de manera que sea una tarea más fluida”, explica Madero.

Pero no sólo se trata de difundir las réplicas. También hay que convencer al receptor del mensaje de que ese rumor es falso, que sólo busca crear un conflicto de convivencia. Por eso, el programa Stop Rumores también se encarga de formar a sus agentes en lo que es la comunicación interpersonal. “Los rumores tienen un alto componente emocional que es muy fuerte de romper. Más allá de que los datos te digan que esa afirmación es falsa, la gente siempre tiene la coletilla del ‘si pero yo conozco a alguien que’ con el que quiere dar consistencia al rumor. Nosotros trabajamos para que nuestros agentes sepan comunicarse con la gente y convencerles de que no es verdad, que se trata de un bulo que por mucho repetirse no deja de ser mentira”, asegura el activista, quien añade que es importante que cada vez sean más las personas que se sumen a la causa.

“Los rumores hacen mucho daño y hoy en día las redes sociales permiten que estas ideas se expandan con mucha facilidad. Tocan temas que para el ciudadano son muy importantes, como son la sanidad o la educación. Y son muchos los ciudadanos que lo están pasando mal y buscan un culpable, un chivo expiatorio y siempre es más fácil culpar al inmigrante en lugar de pensar que son otras las causas”, declara Madero.

La provincia de Cádiz, con una alta tasa de desempleo y de familias en situaciones de precariedad es a priori un buen caldo de cultivo para estos rumores falsos. Sin embargo, Madero apunta que el gaditano ha demostrado que es una persona solidaria. “En la provincia hay mucha gente dispuesta a luchar por los derechos humanos y por la convivencia. La calle está llena de gente buena y eso se ha visto este verano, cuando son mayoría los que han ido a llevar mantas o material de aseo a los centros en los que se han acogido a los inmigrantes”, explica Madero.

En el Campo de Gibraltar, la organización Algeciras Acoge está realizando un encomiable trabajo en su lucha contra esta rumorología. Da charla en colegios, institutos, asociaciones de vecinos. El alumnado del Centro de Educación de Adultos Juan Ramón Jiménez es uno de los que se ha formado para crear agente antirumores. También se han impartido charlas en la Fundación Cruz Blanca, dedicada al acogimiento de transeúntes. Márgenes y Vínculos, que desarrolla actividades a favor de la convivencia  también se ha sumado a la causa, así como varias asociaciones de vecinos.

 

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