Cerca de medio centenar de trabajadores que desarrollan su labor en el recinto monumental de la Alhambra y el Generalife de Granada participan como alumnos en un taller formativo sobre técnicas de soporte vital básico y desfibrilación semiautomática externa. En total, serán 48 personas y dos talleres los que se lleven a cabo en este peculiar enclave durante los próximos días.
El curso tiene como monitores a profesionales del Dispositivo de Cuidados Críticos y Urgencias (DCCU) del Distrito Sanitario Metropolitano de Granada, tal y como ha señalado el delegado territorial de Salud y Bienestar Social de la Junta de Andalucía en Granada, Higinio Almagro. Esta formación, que puede salvar vidas, ha sido acreditada por la Consejería de Salud y Bienestar Social, informa la Junta de Andalucía en un comunicado.
Según los datos del Plan Andaluz de Urgencias y Emergencias, los minutos posteriores a una parada cardiorrespiratoria son cruciales para el paciente, ya que en este tiempo la falta de oxígeno y sangre en el cerebro pueden causar daños irreversibles e incluso la muerte. Por este motivo, es fundamental que, ante una situación de este tipo, la persona que tiene el contacto inicial con el afectado actúe de forma inmediata, alertando a los equipos de emergencias sanitarias y aplicando entre tanto técnicas de reanimación básicas, como la ventilación boca a boca y el masaje cardíaco externo.
En este caso, el programa formativo se complementa con la enseñanza del uso de desfibriladores semiautomáticos externos a personal no sanitario, como vigilantes jurados, personal de control y visita pública, etcétera, que desarrollan su labor a diario en el conjunto alhambreño.
Los desfibriladores son unos aparatos que se emplean en situaciones de parada cardiorrespiratoria para intentar restablecer el ritmo cardíaco del paciente, reduciendo así el riesgo de muerte o la aparición de graves secuelas por falta de riego sanguíneo al cerebro.
PLAN DE ATENCIÓN A LA ACCIDENTABILIDAD
El Plan de Atención a la Accidentabilidad de la Consejería de Salud y Bienestar Social insta a los profesionales que realizan su labor asistencial en los DCCU a formar a la población en general en materia de soporte vital básico y primeros auxilios. El objetivo es que la ciudadanía sea capaz de identificar una pérdida de conciencia, una ausencia de respiración, una parada cardiorrespiratoria y una obstrucción de la vía aérea superior.
Asimismo, los participantes conocen cuándo y cómo alertar a los servicios de urgencias y emergencias a través del 112 ó 061, además de aplicar técnicas de reanimación cardiorrespiratoria básica, maniobras de desobstrucción de la vía aérea, control de hemorragias y uso de desfibriladores semiautomáticos externos.
La Consejería de Salud y Bienestar Social pretende que la ciudadanía sea protagonista del sistema de urgencias y emergencias, potenciando su papel como agente activo en la cadena de supervivencia tras una parada cardiorrespiratoria.
Las enfermedades cardiovasculares suponen el 30% de los fallecimientos en los países occidentales. En Andalucía, se estima que cada año se producen más de 10.000 casos de síndrome coronario agudo, de los que unos 7.000 son infartos agudos de miocardio.