El cine español se viste hoy de tiros largos en la XXIV edición de los Premios Goya y Andreu Buenafuente ha ensayado bromista, pero casi hasta la extenuación, para sorprender y divertir en un trámite, el de presentar la ceremonia, nada fácil.
En la prueba de ayer, abierta a los medios de comunicación, el presentador dejó entrever que el humor y la interacción con los invitados serán las claves de la gala, en la que se entregarán 28 bustos de Goya.
Daniel Monzón, Alejandro Amenábar, Penélope Cruz, Luis Tosar o Maribel Verdú asistirán a una ceremonia en la que compiten con fuerza Celda 211 (16 candidaturas) y Ágora (13).
La noche promete, pero los premiados y la junta directiva de la Academia de Cine no deberían extender la fiesta hasta el alba porque el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, les espera el lunes a las 13 horas en la Moncloa.
En el Palacio Municipal de Congresos, sede de la gala, el plástico cubre la alfombra por la que desfilarán los invitados, los figurantes ocupan los asientos del auditorio con una foto de su representado colgada al cuello y Andreu Buenafuente ensaya una y otra vez para que todo quede perfecto.
Desde el jueves todo el equipo prepara el espectáculo –la última prueba será hoy mismo– y ayer Buenafuente aparecía tranquilo y fiel a su estilo: de buen humor y vestido con vaqueros, camiseta y chaqueta.
Este año el escenario de la gala es espectacular: tiene una forma circular un tanto galáctica y está decorado con bandas de colores cambiantes y un fondo de luces que parecen estrellas.
Las 24 cámaras de TVE que cubrirán la ceremonia –que será emitida en directo y sin cortes– ya están dispuestas para que los espectadores no se pierdan ni un detalle.
Antes de empezar el ensayo del día, Buenafuente mueve un pie, el único gesto que dejará entrever una pizca de nerviosismo en el presentador.
El espectáculo comienza, pero algún detalle se escapa y hay que repetir la secuencia. Buenafuente tararea, con aparente serenidad, y bromea con frecuencia para templar los nervios de todos porque se trata del penúltimo ensayo.
En las dos horas y veinte minutos que dura la gala, se entregarán 28 premios y se podrá admirar la belleza y el estilo de los integrantes de la industria cinematográfica española.
Paz Vega, Penélope Cruz, Juan Diego Botto, Aitana Sánchez Gijón, Emma Suárez, Silvia Abascal, Marisa Paredes, Mario Casas, Gonzalo de Castro o Jordi Dauder son sólo algunos de los presentadores que leerán los nombres de los ganadores.
Las grandes ausencias de la noche serán las de Rachel Weisz –candidata a mejor actriz protagonista por Ágora–, Ricardo Darín –que opta a un premio como actor protagonista por El secreto de sus ojos y a otro como actor secundario por El baile de la victoria– y la del director argentino Juan José Campanella –candidato a la mejor dirección y guión adaptado por El secreto de sus ojos.
Pero no se desanimen los más curiosos porque habrá glamour y talento suficientes y seguro que también alguna sorpresita.
Pérez Gandul apuesta por Monzón
El periodista y escritor sevillano Francisco Pérez Gandul, autor de la novela ‘Celda 211’, en la que se basa la película homónima y una de las que cuenta con más nominaciones a los Premios Goya, mostró ayer su convencimiento a Efe de que esta película será “la gran triunfadora” de la gala.
La película ya ha sido la gran triunfadora “para la crítica y el público”, subrayó Pérez Gandul, quien no dudó en afirmar que piensa, “como la mayoría”, que Luis Tosar tendrá el Goya al mejor actor porque “hace un papel memorable” en ‘Celda 211’.
El escritor lamentó el no haber sido invitado a la ceremonia de entrega de galardones. Preguntado por las razones de su inasistencia a la gala contestó irónico: "Pues no sé, tendrían que preguntárselo a la Academia de Cine o a las productoras; yo sólo aporté la historia que está en el origen de las 16 nominaciones"
Señaló que "al autor de la novela y al argumentista de la película, que es él mismo, le parece una notable falta de cortesía, pero no deja de ser una anécdota, lo importante es que los profesionales que han participado en la película vean recompensado su esfuerzo y su talento con un premio que les dará prestigio".
También consideró que "la ausencia de la película en la terna española para los Oscar fue algo extraño; las productoras han hecho un trabajo eficiente, pero no supieron 'vender' eficazmente la película con lo que se ha dado el contrasentido de que 'Celda 211' no estuviera entre las tres escogidas para los Óscar y, sin embargo, sea la que más nominaciones de Goyas obtuvo".
Sobre la posibilidad de rodar nuevas versiones de la historia, Pérez Gandul señaló que "hay conversaciones con dos importantes y oscarizados guionistas y productores americanos para la venta de los derechos de la novela; están fascinados con la historia y quieren adaptarla a su mundo carcelario."
Esa, consideró, "es la mejor demostración de que las buenas tramas son universales y de que también podemos aportar cosas desde España a la industria cinematográfica más poderosa del Planeta".