El biólogo Sergio Rossi, tras haber investigado “todo lo a fondo que fue posible”, concluye que “nunca ha habido un asesinato en la Antártida; es el único continente donde no lo ha habido”, y allí ha ambientado El cementerio de icebergs, novela que han escrito a cuatro manos él y el periodista Toni Polo.

Amigos desde los cuatro años, Rossi y Polo han ideado una historia que arranca con el asesinato de cuatro científicos chinos en la Antártida y cuyo protagonista es Toni Martí, un científico que viaja en el buque oceanográfico Polarstern y es testigo de la lucha de las grandes potencias por el control del Polo Sur.

“En el libro denunciamos el expolio de los recursos de la Antártida”, afirma en una entrevista con Efe Polo, que sostiene que, aunque la Antártida es según los tratados internacionales “un continente virgen”, la situación cambiará y, “cuando haya la tecnología que lo permita, se tocará y punto”.

“Los científicos -dice Rossi- están en la Antártida porque hay un interés político muy fuerte y todo el mundo quiere estar allí cuando se empiece a hablar de distribuciones”, o, como resume Polo, para “repartirse el pastel antártico”.