La Virgen de la Trinidad ha cambiado de imagen con ocasión de la festividad de la Inmaculada, pero no lo ha hecho con el celeste de costumbre, sino con un manto azul marino y una saya rosa. La Archicofradía destaca que se encuentra ataviada con los colores concepcionistas primitivos, tomando como ejemplo la visión pictórica realizada por el genial maestro del barroco, Francisco Pacheco en 1624 para la Parroquia sevillana de San Lorenzo, destacando en perfecta armonía los colores rosa y azul, que resaltan a la Santísima Virgen en el momento de ser concebida sin pecado original. Fueron muchos los artistas que representaron dicho misterio igual que él; como ejemplo tenemos: Zurbaran, El Greco, Cristóbal Gómez, Fco. Herrera, Martínez Montañes, Duque Cornejo, etc.
Este atuendo que porta la Virgen de la Trinidad esto días, no es novedoso, pues eran los propios que se usaban en las primeras representaciones de dicho Misterio, como ejemplo lo tenemos en la imagen de la Purísima Concepción de la Archicofradía del Silencio de la capital hispalense, primera coorporación que realizó el Voto Concepcionista en el mundo y que éste año celebra su IV centenario.