Una comisión informativa este viernes y un Pleno extraordinario el día 31 de julio marcarán la aprobación de la prórroga del contrato de la gestión del agua con Hidralia por cuatro años más. Ello conlleva el desembolso por parte de la mercantil de 4.142.820,84 euros en concepto de canon por la concesión, una cantidad que tiene tanto su importancia económica como social.
Ese montante económico se va a destinar principalmente a la modernización del alcantarillado de la barriada de Bazán y su impulsión hasta la estación de bombeo de Venta de Vargas, poniendo fin a uno de los grandes problemas históricos no sólo de la barriada, sino de la ciudad.
El delegado de Presidencia, Conrado Rodríguez, anunció este martes en rueda de prensa la decisión del Gobierno que se toma además después de mantener reuniones con todos los grupos municipales a los que se ha explicado la situación.
Lo que tocaba después de la decisión del mes de agosto pasado de proceder a sacar una nueva plica para el servicio era precisamente poner sobre la mesa las nuevas condiciones. No obstante, las consultas realizadas por el Gobierno con el personal del área de Desarrollo Sostenible han abundado en la imposibilidad de tener ese documento en tiempo para sacarlo a licitación.
Hay que recordar que en el área mencionada se han estado trabajando a destajo durante los últimos cuatro años en las plicas de dos de los servicios principales y más complejos del Ayuntamiento, el de la recogida de residuos y limpieza viaria y el de Parques y Jardines.
Demasiado trabajo para poder asumir una nueva plica para un servicio que además de excesivamente técnico y complejo, deberá contemplar en el contrato que se firme hace cuatro años las medidas por el clima y el medio ambiente, además de la informatización de los servicios.
Ese nuevo pliego que se debe tramitar va a establecer un marco de gestión a largo plazo, por lo que desde el Ayuntamiento se va a hacer un esfuerzo de planificación y previsión de futuro, sobre todo para incorporar las herramientas que propicien la incorporación de innovación que permitan que San Fernando sea referente la aplicación de medidas activas en favor del clima dentro de la gestión del ciclo integral del agua.
Así, se abordará la innovación en los diferentes ámbitos que afectan a la gestión del agua; desde la estrategia general, pasando por el propio procedimiento de la contratación pública, la gestión integral de proyectos o la gestión de la explotación, tanto en saneamiento y depuración como en abastecimiento.
También se incrementará la inversión en renovación y modernización de la instalaciones para cumplir los compromisos medioambientales adquiridos y, sobre todo, se trabajará con una importante visión de futuro aplicando las tecnologías más novedosas en materia de transformación digital: Big Data, inteligencia artificial, Internet de las Cosas basado en la sensorización, telelectura, aplicación de tecnologías BIM asociadas al necesario despliegue GIS, realidad aumentada así como, desde otra perspectiva divulgativa y formativa, la incorporación de las redes sociales digitales colaborativas.
En definitiva, se trata de estar preparados y que el desarrollo de una filosofía de economía circular en la gestión del ciclo integral del agua de un salto importante aprovechando los beneficios de las tecnologías Smart, tanto en monitorización, disponibilidad de la información, toma de decisiones automatizadas acentuando análisis predictivos para, en definitiva, hacer más eficientes el uso del agua desde un punto de vista medioambiental, económico y social.
Hay que resaltar que este nuevo contrato con Hidralia que se llevará a pleno la próxima semana ya recoge la intención de tener un nuevo pliego y licitar una nueva concesión administrativa al cabo de cuatro años. Tal como ha resaltado Rodríguez, “el informe de Desarrollo Sostenible al expediente de la propuesta de prórroga ya recoge que harán falta un mínimo de tres años para poder culminar el procedimiento de sacar un nuevo pliego, y esta prórroga nos da ese margen”.
Esa es precisamente una de las causas por las que el Ayuntamiento, siguiendo la línea de otros consistorios que han realizado estudios en ese sentido, se mantiene -salvo algún grupo municipal- en la convicción de que se trata de un servicio que después de veinticinco años en manos de una empresa privada no puede ser asumido por la ciudad porque no se cuenta ni con el personal especializado ni con el sofisticado material que hoy en día precisa la gestión del agua.
Conrado Rodríguez agradeció la disposición de los diferentes grupos políticos municipales “independientemente de lo que voten en el Pleno” y confió en sacar adelante la propuesta. Entre otras cosas porque las cosas se han hecho como hay que hacerlas; primero reuniéndose con los demás partidos y después elevándolo al Pleno.