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Sevilla

El casco histórico pierde en diez años un 5,66% de su población

El análisis del periodo entre 2011 a 2021 refleja la pérdida de habitantes de los doce barrios del centro: 3.426 menos

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  • La Giralda desde Mateos Gagos en el casco histórico. -
  • Los que más: Santa Cruz se ha dejado el 15% y San Julián lo encabeza con 457 menos
  • Los que menos: Alfalfa y Santa Catalina son los de menor sangría demográfica
  • Crece en 1.277 el número de extranjeros y cae en 4.703 el de españoles

Casi 5.000 sevillanos han abandonado alguno de los doce barrios que componen el casco antiguo de Sevilla en los últimos diez años, cifra que no se ha visto compensada por el incremento de la población extranjera, casi 1.300, por lo que el boom turístico del centro no ha servido para fijar o incrementar los habitantes de esta zona de la ciudad, siendo Santa Cruz y San Julián los que más han perdido y Alfalfa y Santa Catalina, los que menos.

El análisis del Padrón Municipal que realiza Manuel J. Florencio sobre la evolución en el distrito Casco Antiguo durante el último decenio, en paralelo al boom turístico experimentado por Sevilla, pone de manifiesto que los doce barrios históricos de la capital andaluza, desde Alfalfa hasta Santa Cruz, han perdido población en mayor o menor medida. El distrito que tradicionalmente se identifica como el Centro ha pasado de 60.437 habitantes en 2012 a 57.011 en 2022, una pérdida de 3.426 pobladores (un 5,66%).

Proporcionalmente, el barrio que más habitantes se ha dejado en este decenio es el de Santa Cruz, con una mengua de casi el 15% (410 residentes menos). , una zona en la que la patronal hotelera Exceltur ya destacaba que el 61% de las viviendas de este barrio están ya destinadas a los turistas en vez de a los sevillanos y que es el tercer barrio de España con más plazas turísticas por cada 100 habitantes.

Santa Cruz ha captado en este decenio tan sólo ocho extranjeros, que han decidido empadronarse en el barrio (de 307 foráneos se ha pasado a 315), por lo que el éxodo de nativos (418 menos) no ha sido compensado ni de lejos y las casas en que vivían habrían quedado vacías o destinadas al mercado turístico.

Pese a su fama, no es el barrio con mayor proporción de extranjeros residentes, título que corresponde a San Bartolomé (el 14,45% de su población es de origen foráneo), pero no le anda a la zaga, con un 13,36% de vecinos nacidos fuera de España.

Alfalfa y Santa Catalina son los barrios del Casco Antiguo con menos sangría demográfica, del orden de un punto y medio. Cuantitativamente, San Julián es el barrio peor parado, con 457 habitantes menos en el último decenio, mientras que Encarnación-Regina ha perdido desde 2012 el 7% de sus habitantes (309), séptimo en por número de vecinos perdidos.

Se pierden nacionales pero no se ganan tantos extranjeros

Todos los barrios del Centro pierden habitantes y todos los habitantes que pierden son de nacionalidad española, más que probablemente sevillanos en su inmensa mayoría, pero todos los barrios ganan residentes nacidos en el extranjero. “No son aves de paso, sino que se han establecido y empadronado en el distrito como unos vecinos más”, resalta Florencio. En 2012 había en conjunto 5.000 extranjeros en números redondos (concretamente, 4.977). En 2022, la cifra había ascendido a 6.254, con un incremento de 1.277 (+25,65%).

Por tanto, cabe colegir que parte de las viviendas que los sevillanos se han visto obligados a abandonar en el Casco Antiguo están siendo ocupadas por una población extranjera, probablemente de mayor poder adquisitivo como para pagar las cada vez mayores rentas de alquiler o para su adquisición en propiedad.

El 62% de los extranjeros que viven en el Centro son de origen europeo, seguidos de un 23% de americanos y de un significativo 8,73% de asiáticos, éstos por delante de los africanos (5,18%) pese a su lejanía de Sevilla.

Sólo hay cinco barrios en el Casco Antiguo con menos de un 10% de población extranjera, aunque rondan esa cifra: San Vicente, San Julián, Arenal, Museo y San Lorenzo. En el lado opuesto, hay tres barrios con más del 13% de sus habitantes nacidos allende nuestras fronteras: San Bartolomé, Santa Cruz y Alfalfa.

En números absolutos, Feria es el barrio preferido por los extranjeros para asentarse en Sevilla, ya que viven en el mismo 812 foráneos, pero donde más ha crecido el número de los no nacidos en España es en Alfalfa, con 214 más, seguida de San Gil, con 194. Por otra parte, San Julián es el barrio del Casco Antiguo que más población nativa ha perdido: 583 personas. También por encima del medio millar están San Gil (535) y Feria (515).

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