Los
empresarios del Metal han alertado de la “
escalada del absentismo y la bajada de productividad” en un sector que en la provincia cuenta con más de
9.000 empresas y supera los
83.000 trabajadores, una situación que
incrementa los costes en más de dos mil millones y que consideran que se verá
“agravada” por la reducción de la jornada laboral, medida que piden sea
dialogada y ajustada a las “
necesidades particulares de cada sector”.
Fedeme, la Federación de Empresarios del Metal, ha celebrado este martes su asamblea general en la que, además de hacer balance, han querido aprovechar para
“dar la voz de alarma” sobre aspectos que
preocupan a los empresarios del sector, especialmente, “la escalada del absentismo y la bajada de la productividad”.
Según los datos ofrecidos por el presidente de Fedeme,
Francisco Javier Moreno Muruve, el
absentismo ha subido un 13% hasta marzo respecto al ejercicio anterior y en consecuencia el
incremento de costes para las empresas
se ha disparado un 16,3%, hasta los 2.003 millones, según el Informe trimestral Asociación de Mutuas de Accidentes de Trabajo (AMAT).
“Y mientras los datos de absentismo siguen marcando cifras de récord, la
productividad y eficiencia de las empresas continúa a la baja, marcando un
descenso de 5,05 puntos respecto al pasado ejercicio”, según el III Barómetro Adecco Outsorcing sobre productividad y eficiencia. Eso sí,
hay excepciones en algunos sectores,
como el de la aeronáutica, puntualiza.
“Baja la productividad y en consecuencia la competitividad de nuestras empresas, situación que se verá
agravada, tal y como venimos advirtiendo desde las organizaciones empresariales, con la
reducción de la jornada laboral anunciada por el Gobierno. Y es que hay
medidas que exigen de un
profundo diálogo y deben ser materia de debate en la
negociación colectiva y tomar en consideración las
necesidades particulares de cada sector”, ha reivindicado Moreno Muruve
El presidente de Fedeme ha recordado que su entidad lleva “
décadas potenciando el diálogo social como herramienta clave para el buen devenir y el entendimiento mutuo de las empresas y profesionales del Metal”, defendiendo la negociación colectiva como “
nexo de unión para atajar los temas de calado que afectan a empresas y trabajadores”.
Para Moreno Muruve,
"la estabilidad, la paz social y la certidumbre son buenas aliadas del crecimiento y la competitividad de las empresas. Políticas económicas y laborales que no vayan en esta dirección son políticas que merman la actividad empresarial”, concluía.
Por su parte, el director gerente de
Fedeme, Carlos Jacinto Marín, ha puesto en valor la labor de acompañamiento que esta Federación ha realizado para con sus asociados, siendo un “aliado imprescindible” para los empresarios del Metal, tras la “
complicada etapa” vivida en por las empresas metalúrgicas con la
crisis postpandemia, la
escalada bélica, el incremento de los
costes energéticos y de materiales y las dificultades de financiación por el
ascenso de los tipos de interés. “Todo ello, en un
marco inflacionista, también extraordinario, agravado, además, por l
a vorágine normativa laboral de este último periodo”, aseguraba.