El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, ha destacado este jueves su compromiso con la "integración definitiva" del Polígono Sur durate su visita a las obras de la Factoría Cultural, iniciadas a finales de abril y que han de quedar acabadas entre septiembre y noviembre de 2015, mientras que en diciembre se abonará el pago a las empresas implicadas para recibir los fondos Feder.
En su visita, junto a la comisionada para el Polígono Sur, María del Mar González, Zoido ha insistido en su "empeño" en que el Polígono Sur cuente con este centro "multidisciplinar y que los vecinos encuentren aquí un lugar donde compartir y convivir". "Queremos que esta inversión suponga la integración definitiva del Polígono Sur", sentencia, tras poner en valor el "intenso" trabajo desarrollado en la zona y que "ha dado sus frutos, pero aún queda mucho por hacer".
Ha insistido en que como alcalde no a "consentir que se dé ni un paso atrás". "Todo cuanto se haga por parte de las administraciones parece poco en este barrio, por ello quiero transmitir antes que nada mi compromiso y el del Ayuntamiento de Sevilla con el Polígono Sur", afirma.
El alcalde detalla que los pasos dados en el denominado Plan Urban han sido "muy estudiados y realizados con mucho esfuerzo para que los vecinos de la zona tengan un centro de estas características en su barrio". La construcción de este "café cultural" es entendida, según añade, como un edificio singular, concebido como centro de carácter "metropolitano de investigación, formación, producción, documentación, programación de exposiciones y espectáculos, y observatorio cultural espacio cultural, de encuentro para jóvenes artistas de las artes plásticas, visuales y escénicas, que pueda ser un lugar de reunión y debate con una especial importancia que se dará a la cultura del flamenco".
El edificio, ubicado en la esquina nororiental formada por las calles Luis Ortiz Muñoz y Arquitecto José Galnares, tiene una superficie de 2.172 metros cuadrados. Está compuesto de planta sótano, planta baja, plantas primera y segunda y el uso principal del edificio se desarrolla en las plantas superiores, teniendo como pieza principal la sala auditorio y un espacioso vestíbulo, que articula las demás zonas del edificio y sirve de zona de encuentro y exposiciones.
En la zona sur, el edificio se abre al espacio público haciéndolo participe de su uso tanto en la zona de cafetería como en el auditorio, ya que la trasera del escenario se puede abrir al exterior y al mismo tiempo servir de pantalla de proyección para su utilización en verano. Unas lamas de aluminio en el resto de la franja sur permiten el total control solar de esta zona. Por su parte, el sótano se destina principalmente a garaje, aunque en la zona bajo el escenario se han dispuesto almacén y camerinos conectados directamente con éste.
Este edificio es consecuencia del concurso internacional de ideas que se desarrolló a finales de 2011 y que se realizó para el desarrollo de una de las actuaciones previstas en el Programa Uurban, financiado con fondos Feder. El jurado seleccionó entre 54 propuesta este proyecto bajo el lema 'Café para todos", redactada por la entidad Primo Trullenque Arquitectes, de Valencia, tras valorar el equilibrio y obtenerse un edificio eficiente, económico y funcional, además de su singular concepción arquitectónica.
Los materiales empleados en las fachadas son el bloque cerámico de termoarcilla con aislante en el exterior y vidrio Uglass en la fachada norte, en la fachada sur se han dispuesto lamas horizontales de aluminio para el control solar. El zócalo del edificio, la planta baja, se revestirán por motivos de durabilidad y mantenimiento con un aplacado de granito. El edificio se cubre con cubiertas plana invertida y cubierta ligera, que permiten fácilmente la conservación y mantenimiento de las mismas.