La Policía Nacional ha llevado a cabo dos operaciones distintas que se han saldado con la detención de tres personas, y que han permitido la recuperación en Écija y Alcalá de Guadaíra (Sevilla) de más de 200 piezas históricas y artísticas de distintas épocas que habían sido supuestamente sustraídas de los lugares donde estaban expuestas para su conservación y estudio.
Según ha detallado este jueves la Policía en una nota, las detenciones se han realizado en Écija, y en el marco de estas actuaciones se han practicado cuatro registros domiciliarios que han permitido la recuperación de los efectos supuestamente sustraídos para su restauración y entrega a las entidades encargadas de su custodia.
La primera de las investigaciones se centró en torno a un conjunto de piezas históricas de cuya existencia los agentes tuvieron conocimiento con motivo de las gestiones de prevención y seguimiento de este tipo de reliquias que se encuentran por todo el territorio.
De esta forma, los investigadores localizaron 31 piezas de cerámica, dos monedas y un asa de caldero, todas de "incalculable valor histórico", y que datan de épocas que comprenden desde el Neolítico hasta la etapa califal, pasando por la época romana.
Se trata, según ha abundado la Policía, de piezas que pertenecían a la Universidad de Sevilla y que fueron supuestamente sustraídas hacía varios años por un empleado de una empresa de mudanzas que trabajó en el centro, y que aún las conservaba en su domicilio de Alcalá de Guadaíra, donde se llevó a cabo el correspondiente registro para la recuperación y posterior devolución a los archivos de la Universidad.
Esta operación ha sido realizada por los agentes del Grupo de Robos y Patrimonio Histórico de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de Sevilla.
PIEZAS DE LOS SIGLOS XVIII Y XIX
Por su parte, los agentes de la Comisaría Local de Écija han detenido a tres personas supuestamente implicadas en la sustracción de piezas histórico-artísticas de los siglos XVIII y XIX que se encontraban en el Palacio de Peñaflor de la localidad astigitana, y que desaparecieron a finales del pasado mes de abril.
Las primeras gestiones de investigación realizadas por los agentes han permitido la identificación tanto de los dos supuestos autores materiales como de otra mujer presuntamente implicada en los hechos por receptación, y que fueron "vitales para evitar la pérdida de las piezas en el mercado negro".
Concretamente, se trataba de dos espejos barrocos del siglo XVIII, fabricados en Francia expresamente para el Palacio de Peñaflor, un reloj de péndulo del siglo XIX, varios trozos de madera y metal decorativo, una cubertería de plata de 200 piezas y un portajaulas de la época.
La denuncia interpuesta por la fundación encargada de la custodia y conservación de las piezas y la rápida actuación de los investigadores --resolvieron el hecho en tan sólo 24 horas-- ha permitido la recuperación de estas piezas, cuyo valor estimado se calcula en torno a los 150.000 euros.