El barrio de San Pablo se ha teñido en la madrugada de este martes de sangre tras la muerte de uno de sus vecinos a puñaladas a manos de su hijo, un politoxicómano de 37 años que, tras una fuerte discusión, asestó entre seis y siete puñaladas a su padre, causándole la muerte y sin que los servicios de emergencia pudieran hacer nada por salvarle la vida.
Sobre las 05:20 de la madrugada un vecino de la calle Gitanillo de Triana, en el pouloso barrio de San Pablo, alertaba a la Policía Nacional de que un hombre estaba amenazando a otro en una de las viviendas de la calle, según han informado desde la Policía Nacional.
Los agentes encontraron a la víctima boca abajo, tendido en el suelo en el salón de la vivienda y rodeado de un gran charco de sangre. Los servicios de emergencia no pudieron hacer nada por salvarle la vida a la víctima, de 56 años, que falleció desangrada tras la agresión.
Su hijo, un politoxicómano al que al parecer también le atribuyen algún tipo de transtorno mental, salió de la vivienda tras la agresión con el cuchillo en la mano, llegando incluso a manchar de sangre la entrada del bloque de viviendas y algunos coches estacionados en la zona, según han relatado los vecinos.
Después volvió a subir al inmueble y comenzó a tirar ropa por las escaleras comunes, según relatan sus vecinos, aunque la Policía Nacional lo detuvo en las inmediaciones del edificio.
Según fuentes policiales, el presunto autor de la agresión mortal le asestó a su padre entre seis y siete puñaladas en el abdomen y en los brazos en el salón de la vivienda, donde se halló el arma homicida. Al parecer el presunto agresor le pidió dinero a su abuela, que reside en otro piso del bloque, para comprar cocaína y también lo intentó con su padre, al que mató cuando se negó a dárselo.
Según han relatado los vecinos a la Cadena Ser, aunque las discusiones entre ambos eran frecuentes no imaginaban que pudiera acabar produciéndose una agresión mortal. Aseguran que la víctima era una persona plenamente integrada en el barrio, mientras que al hijo lo consideran “reservado” y adicto a las drogas desde hace años.
La Policía, que al menos hasta este miércoles no pondrá a disposición judicial al detenido, ha apuntado que el hijo también presentaba diversos cortes en los brazos, por lo que fue ingresado en un hospital para ser curado de las heridas.