El Grupo de Participa Sevilla ha apostado por un nuevo convenio sanitario con el Servicio Andaluz de Salud para la plantilla municipal, a la par que indica que sus concejales y el personal del grupo municipal han renunciado al seguro médico privado complementario que tiene el Ayuntamiento hispalense, ya que "no tendría sentido apostar por lo común y, por otro lado, estar utilizando un seguro privado que no defendemos".
En un comunicado, la portavoz adjunta de Participa, Cristina Honorato, ha explicado que, un año más, el Ayuntamiento ha renovado su contrato con una empresa privada sanitaria para "garantizar los gastos necesarios" de la plantilla municipal en este tipo de asistencia, por un montante de 1.870.927,39 euros para 2007. "No queremos que se deje de realizar este gasto, ni estos servicios para la plantilla, sino que se realice a través de un acuerdo con el Servicio Andaluz de Salud (SAS)", ha manifestado.
Así, propone que, para años posteriores, la Junta y el Ayuntamiento busquen nuevos acuerdos y modalidades de convenios que "reviertan en una mejor asistencia sanitaria para toda la ciudad". Señala que este seguro médico "es reflejo de la negociación colectiva en el Ayuntamiento" y que "es fundamental para que puedan acceder a servicios sanitarios que no suele ofrecer la sanidad pública".
"El camino debe ser fortalecer la sanidad pública, no derivar recursos a empresas privadas que cada vez están más controladas por empresas de capital riesgo y fondos buitres", ha insistido. Honorato deja claro que "en ningún caso" esta propuesta "nunca debe significar la perdida de servicios sanitarios para los trabajadores del Ayuntamiento, sino otro modelo de gestión y de inversión pública".
Para la edil, son servicios que "no se pueden perder, pero que deberían ser realmente gestionados por la Administración pública". "No puede promocionarse una sanidad de primera y otra de segunda según el puesto de trabajo", ha insistido
Participa Sevilla entiende que los recursos públicos deben servir para cubrir las necesidades de toda la población y no para "privatizar de una forma parcial y encubierta el sistema sanitario". "Para las empresas de salud estos convenios suponen un auténtico filón para lograr beneficios, lo que supone que la salud no es lo más importante para ellas", recalca.
Igualmente, apuesta por la necesidad de mejorar otros aspectos relacionadas con la salud como son los riesgos laborales, la mejora de los espacios de los servicios sanitarios u otra clase de medidas relacionadas con la salud pública que "supondrían un avance en la situación de la ciudad como la calidad del aire o la seguridad alimentaria".
