Los gritos y lemas lanzados por medio millar de personas este mediodía ante el Palacio de Justicia de Pamplona, donde se juzga a cinco acusados de una violación grupal a una joven en los Sanfermines de 2016, han obligado al tribunal a hacer un receso en la vista, en la que hoy declaran los imputados.
La Sección Segunda de la Audiencia de Navarra juzga desde el pasado día 13 a los cinco jóvenes denunciados por una violación en grupo por una joven que tenía 18 años en el momento de los hechos, vista de la que hoy se celebra la octava sesión.
El tribunal aceptó en los primeros días del juicio que se sumase a la causa un informe presentado por la defensa de los acusados y elaborado por detectives sobre la actividad de la denunciante en las redes sociales pero rechazó la inclusión de los mensajes enviados por móvil por los imputados, que se hacen llamar "la Manada".
Los concentrados, convocados por las asociaciones feministas "Lunes Lilas" y "Andrea", portaban una pancarta con la frase "¡No es no!, ¡Justicia!" en castellano y euskera y carteles con lemas como "Juicio a los imputados, no a las víctimas" y "La violencia sexual es violencia machista".
Las componentes del colectivo "Lunes Lilas" Eloisa Urritikoetxea, Lorea Irisarri y Nekane Merino han leído un comunicado en el que han criticado que el tribunal aceptara como prueba documental el informe de los detectives, que exista "un sistema judicial machista que cuestiona la versión de la víctima" y juzgue "su vida posterior a un proceso traumático como es una violación".
En el manifiesto se señala que "este juicio es un ejemplo claro de lo que significa la cultura de la violación" y que en la vista "está en juego la respuesta que el Estado y el poder judicial, en concreto, vayan a dar a una agresión especialmente brutal".
Las portavoces de los convocantes han recordado el proceso judicial del asesinato de la joven Nagore Laffage a manos del navarro José Diego Yllanes en los Sanfermines de 2008.
En opinión de estos colectivos, aquel fue "un juicio injusto que despreciaba los derechos de las mujeres, ya que se concedió credibilidad absoluta al acusado".
En el texto se indica que "no solo fueron" los cinco acusados de la supuesta violación grupal quienes participaron en el "acto salvaje" que juzga la Audiencia, sino que fueron 21, ya que otras 17 personas, en los grupos de whatsapp, "se rieron, se mofaron y se callaron ante los vídeos y conversaciones compartidas" sobre estos hechos.
Durante el receso, el letrado Agustín Martínez Becerra, abogado de tres de los acusados, ha dicho a los periodistas que no había autorización para una concentración este mediodía ante el Palacio de Justicia y ha criticado que la vista haya tenido que interrumpirse por el ruido que llegaba a la sala con los eslóganes que coreaban los congregados.