La Reina Sofía ha inaugurado en el Zoo Aquarium de Madrid el nuevo espacio que acoge desde este miércoles a Jazmín y Kalama, la primera pareja de linces ibéricos que vivirán en la capital española y contribuirán a concienciar a los visitantes sobre la conservación y recuperación del felino más amenazado del planeta.
Acompañada por la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, doña Sofía ha presenciado los primeros pasos de esta tímida pareja en su nuevo hábitat, que recrea el bosque mediterráneo en 600 metros cuadrados, y ha utilizado su teléfono móvil para tomar a distancia varias fotografías de ambos linces, procedentes del centro de cría de Granadilla (Cáceres).
Kalama, el macho, de tres años, ha sido el primero en aventurarse con cautela en ese territorio acotado pero observado de cerca por seres humanos y, minutos después, la hembra, de cuatro años, y llamada Jazmín, se ha sumado a la experiencia de enfrentarse a las miradas curiosas de autoridades y periodistas, al otro lado de la verja o de la mampara transparente que les separaba de la Reina Sofía y sus acompañantes.
"Es fantástico", comentaba sonriente doña Sofía tras contemplar a la pareja de felinos en su nuevo entorno y recibir explicaciones de los responsables del Zoo, del Programa de Cría de Lince Ibérico en Cautividad y del proyecto Life+Iberlince, que lidera desde 2002 la Consejería de Medio Ambiente de Andalucía.
Gracias a estas iniciativas, ya son 391 ejemplares los que han nacido en los cinco centros de cría de la Península Ibérica -el de Granadilla, el de Acebuche en Doñana, el de Jerez, el de Olivilla en Jaén y el portugués de Silvas- y se han reintroducido 145 en el medio natural, lo que ha permitido su reproducción en libertad en Extremadura, los Montes de Toledo y Portugal.
Frente a los dos únicos núcleos de población en Andalucía de hace quince años, con apenas un centenar de ejemplares, hoy son ya 404 los que viven en libertad en la Península y a esa cifra ha rendido hoy homenaje un grupo de niños de campamentos del Zoo Aquarium, que ha recibido a doña Sofía junto a una senda formada por otras tantas huellas de lince, hechas por ellos mismos con cartulinas.
Antes de que la Reina cortara la cinta inaugural del recinto y descubriera una placa conmemorativa, han tomado la palabra el consejero andaluz de Medio Ambiente, José Fiscal, y la ministra Isabel García Tejerina, quien ha destacado cómo el esfuerzo conjunto de las Administraciones y de todos los sectores implicados "ha permitido salvar al lince ibérico de la extinción".
"El futuro del lince es hoy mucho más esperanzador que hace unos pocos años", ha subrayado García Tejerina, tras recalcar que el año próximo otros 50 ejemplares se incorporarán a la vida en libertad y felicitarse por una cesión al Zoo de Madrid que contribuirá a "mejorar el conocimiento de esta especie emblemática" y también a divulgar la utilidad de los programas de conservación.
Por su parte, Fiscal ha recordado las iniciativas de la Junta de Andalucía para recuperar el lince ibérico, a las que ha destinado más de tres millones de euros, y ha elogiado la llegada al Zoo de Madrid de Jazmín y Kalama -que no eran aptos para el programa de cría y tampoco podían ser devueltos al medio natural- como ejemplo de ayuda valiosa a la conservación de especies de fauna amenazadas.