En los próximos meses, los diputados en Les Corts deberán ocuparse de
aprobar las leyes que todavía hay pendientes antes del 4 de abril de 2023, fecha en la que se disuelven Les Corts. De no producirse, quedarán aplazadas a la próxima legislatura.
Una de las tareas más urgentes es la
aprobación del presupuesto. Sin embargo, no es la única preocupación entre los partidos que forman el Gobierno del Botànic. De hecho, ante la cantidad de trabajo, la mesa de Les Corts estudia dejar la aprobación de algunas leyes para enero, un mes en el que habitualmente se detiene la actividad parlamentaria.
Algunas de las leyes pendientes son la del Cambio Climático, Bienestar Animal, Economía Circular, la Ley de viviendas colaborativas o la
Tasa Turística, aunque ésta última continuará generando debate debido a la postura de los socialistas.
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, afronta el nuevo curso político desde "nuestra visión integradora de Comunitat Valenciana para todos aquellos que representamos", y con el deseo de que "
todos los malos pronósticos que hay sobre la economía no se cumplan".
Este martes, la Junta de Síndics se reunirá para fijar el
calendario parlamentario y acordar así la fecha en la que tendrá lugar el primer pleno del curso.