Las elecciones para gobernador de Tokio se celebran este domingo con un total de 56 candidatos, récord en estas elecciones regionales, y donde destacan la extravagancia de sus campañas junto a los numerosos pósteres que empapelan las calles de la capital japonesa.
La actual gobernadora de Tokio, Yuriko Koike (71 años), y la senadora Renho Murata (56 años) son las favoritas para ganar los comicios de esta área metropolitana, la más poblada del país y que representa un quinto de la economía nipona, y donde la inflación y la baja natalidad se presentan como principales temas a solucionar.
Koike está apoyada por la sección local del Partido Liberal Democrático (PLD), partido de ideología conservadora que gobierna Japón, y busca su tercer mandato mientras que Renho, como se conoce popularmente a esta candidata, se presenta de manera independiente apoyada por algunas de las principales fuerzas progresistas opositoras.
Aunque todo apunta a que las elecciones no tendrán ninguna sorpresa, ya que las grandes favoritas se posicionan primeras en las últimas encuestas para este domingo, muchos mensajes, carteles y propuestas de candidatos menos conocidos han acaparado la atención por su excentricidad.
Limitaciones en la ley electoral japonesa
Los requisitos para presentarse a gobernador de Tokio son simples: el aspirante debe pagar 3 millones de yenes (unos 17.200 euros) y no existe cupo máximo de candidatos, lo que lleva a muchas personas a postularse con diversos propósitos.
Solo los candidatos o partidos que consigan un 10% de los votos verán reembolsada esta cantidad inicial, un dinero que para muchos es suficiente para subir números en redes sociales o promover diversos mensajes.
Las leyes electorales de Japón prohíben pagar por publicidad en sus campañas y ponen el foco en la televisión pública estatal, NHK, donde cada aspirante tiene seis minutos para emitir un discurso, o en los carteles en vías públicas que, en este caso, se encuentran en 14.000 lugares distintos de la capital nipona.
Estas estrictas medidas representan una gran oportunidad para 'youtubers', comediantes y artistas que luchan por hacerse famosos, explica a EFE el profesor universitario Jeffrey J. Hall, especializado en estudios japoneses en la Universidad de Estudios Internacionales de Kanda.
Actuaciones "tontas" o radicales se convierten en virales y permiten ganar miles de seguidores a muchos candidatos que "pueden verlo como un buen negocio", añade Hall.
Carteles y atención al mejor "postor"
Estos carteles han generado polémica con candidatos como Kawai Yusuke, conocido por disfrazarse del "Joker" o de "La Máscara", que aboga por la poligamia para solucionar el problema de la natalidad en Tokio y cuyos pósteres llegaron a incluir imágenes explícitas de una modelo y cantante japonesa.
El Dr. Nakamats es otro de los excéntricos candidatos, un señor de 96 años que se presenta a estas elecciones desde 1991 sin éxito y cuyo cartel se centra en su alto coeficiente intelectual o su herencia samurái.
Entre el resto de candidatos, encontramos el caso de Matsuda Michihito o "Alcalde de IA" que se esconde tras una máscara blanca y apuesta por el uso de la inteligencia artificial para tomar decisiones políticas, o el Nuevo Partido Chushingura Gishi liderado por un guerrero samurái de 79 años y cuyo programa nombra el plan de defensa y seguridad contra una posible guerra.
"Los candidatos menores prácticamente no reciben atención y todos saben que no tienen ninguna posibilidad real de ganar", aseguró Hall, quien añadió que la vulgaridad de sus campañas es más bien "un síntoma de apatía (política) que una causa de ella".
Uno de los casos más llamativos ha sido el del "Partido NHK" cuyo programa se basa en denunciar las tarifas que se pagan por la televisión estatal nipona y que presentaron 24 candidatos estas elecciones.
Estos aspirantes no son candidatos reales a los comicios, ya que sus puestos en los diversos paneles de la ciudad se venden por precios entre 5.000-25.000 yenes (entre los 30-140 euros aproximadamente) por el mismo partido, carteles que puede comprar cualquiera para promocionar redes sociales, ilustraciones o incluso mascotas.
En cualquier caso, el sistema electoral japonés favorece a los candidatos con gran respaldo organizativo de los principales partidos políticos, ya que solo permite hacer campaña las dos semanas anteriores a las elecciones.
Las mencionadas favoritas Koike y Renho han celebrado diversos mítines por la capital japonesa donde cuentan con la asistencia de numerosos locales e indecisos.
Una ciudadana presente en un mitin de Koike en el barrio tokiota de Setagaya declaró a EFE que aunque la gran cantidad de candidatos le hace dudar, considera que "Koike es la favorita, es la actual gobernadora y la más famosa de todas".