El compositor carnavalero Juan Carlos Argón, que este año ha dirigido la comparsa "Catastrophic Magic band", ha lamentado la forma en la que muchos aficionados tienen que conseguir las entradas para el Carnaval de Cádiz, hasta el punto de compararlo con un campo de refugiados.
En una entrevista con Efe en Huelva, donde actuará este fin de semana en varios puntos de la provincia, Aragón ha asegurado: "Me ha dolido mucho ver a la gente como si fuese un campo de refugiados, o en peores condiciones como en la cola de semifinales", para entender que esta situación tiene que ser modificada, ya que "o esto cambia o cambiamos nosotros".
Ha indicado que, al ver el estado en que la gente hacía cola para conseguir las entradas, le entraron ganas de "coger la guitarra, ir allí y cantarles el repertorio de las semifinales allí mismo".
Y es que, Juan Carlos Aragón asegura que cantar el repertorio de una agrupación en un escenario como el del Teatro Falla "no se puede describir con palabras, porque son sensaciones y emociones que pertenecen al reino de lo inefable", para subrayar "lo que se siente en ese momento y lo que estás recibiendo, porque no es el calor, sino el tipo de calor que se recibe del público".
"Es gente que gente que ha venido de fuera, que se ha gastado el dinero, que algunos ni encuentran alojamiento", ha indicado, lo que provoca que los grupos se emocionen ante este ambiente: "A los que estamos arriba muchas veces nos cuesta la misma vida".
A pesar de que este año su comparsa no ha pasado a la final, Juan Carlos Aragón se queda con el cariño del público y como sigue su repertorio en todas sus actuaciones: "Es una de las mayores satisfacciones que puedes tener, que te acompañe la gente cantando es muy bonito".
Sobre el papel reivindicativo que tiene el carnaval, Aragón entiende que "cada uno tiene un papel, y yo pongo mi grano de arena, doy patadas y puñetazos líricamente", aunque admite que sus letras siempre levantan controversia, pero sentencia: "Yo sigo para alante, y el que me quiera seguir que me siga".