El Tribunal Penal Supremo, sin embargo, condenó a la pena capital al primo de Sadam, Ali Hasan al Mayid, también conocido como Alí el Químico, y a dos dirigentes del partido gobernante durante el régimen de Sadam, Mahmud Fizi Mohamed y Aziz Saleh Hasan.
El caso juzgado se remonta a 1999, en unos incidentes que se registraron tras el asesinato, el 19 de febrero de ese año, del más importante líder chií de entonces, Mohamed Sadeq al Sadr, así como su hijo, en la provincia chií de Nayaf, al sur de Bagdad.
El líder chií asesinado era el padre de clérigo Muqtada al Sadr, actualmente uno de los principales enemigos de la ocupación militar de Estados Unidos en Irak y líder de las milicias conocidas como Ejército del Mahdi.
Tras la muerte de Al Sadr, decenas de chiíes fueron arrestados en dos mezquitas de Sadr City, en el este de Bagdad, y posteriormente aparecieron asesinados, aparentemente por agentes de seguridad del régimen de Sadam Husein.
Además del ex viceprimer ministro Aziz quedaron absueltos Seifedin Mahmud al Mashadadni, líder local del partido Baas, y Okla Abed Sakar y Ibrahm Saheb Karam, también dirigentes del mismo grupo político gobernante.
Junto a las penas capitales dictadas, el mismo tribunal condenó a cadena perpetua al ex alto funcionario Latif Nasif Jasem y al ministro del Interior en esa época, Mohamed Zimam Abdel Razek.