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Lunes 24/06/2024  

Punta Umbría

Rebollo consolida su vocación de autor con ?La mujer sin piano?

El cineasta madrileño Javier Rebollo consolidó en San Sebastián su vocación de autor con La mujer sin piano, una película arriesgada y protagonizada por Carmen Machi que, en su carrera por la Concha de Oro, sonó bien afinada pero demasiado minoritaria.

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  • Carmen Machi y el actor, Jan Budar (i) y Javier Rebollo (d). -
El cineasta madrileño Javier Rebollo consolidó en San Sebastián su vocación de autor con La mujer sin piano, una película arriesgada y protagonizada por Carmen Machi que, en su carrera por la Concha de Oro, sonó bien afinada pero demasiado minoritaria.

El autor de Lo que sé de Lola, que también concurrió en San Sebastián hace dos años, presentó ayer su segunda película, una cinta rodada prácticamente en su totalidad de noche, en la que filma con mimo un Madrid rancio pero magnético y que es como “una habitación con muchas puertas y se puede entrar por la que uno quiera”, explicó en rueda de prensa.

Aunque debido a su lenguaje reposado, críptico y silencioso, muchos prefirieron buscar la puerta de salida, La mujer sin piano arrancó también aplausos de los que comulgaron con una propuesta que “no es minimalista. Es simple pero muy cargada, llena de detalles”.

“Para mi madre será una película melodramática. Para mi padre una película política. Para mí va de Javier Rebollo modelando el cuerpo a sus dos actores”, que son Machi y el checo Jan Budar.

La célebre protagonista de la serie de televisión Aída es Rosa, quien vive inmersa en un mundo de monotonía al lado de su marido taxista, ansiosa por la reciente emancipación de su hijo y entregada a su trabajo de depiladora.

Una noche, la del 16 de marzo de 2003, mientras el mundo se metía en la Guerra de Irak, ella decide iniciar su propia batalla y romper con todo.

Con peluca y una maleta, se va a la Estación Sur de Madrid, un lugar “que tiene mil películas” y donde Rosa busca la vida que nunca ha tenido.
 
“Lo esencial de lo carnavalesco no es ponerse la máscara, sino quitarse la cara”, reflexionó Rebollo.

Su nuevo disfraz y su nueva vida estarán llenos de un “humor alcohólico”, según lo definió su director, que le emparenta con eAki Kaurismaki.

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