Los partidos han advertido además de que esta norma, que contendrá más de la mitad de las medidas negociadas, no supone que se haya alcanzado el deseado Pacto de Estado que pidieron los partidos y el Gobierno trató de impulsar en las negociaciones del Palacio de Zurbano.
El hecho de que en el decreto no estén todas las medidas del documento que se negoció no significa, según fuentes del Ejecutivo, que no vayan a aprobarse otras, especialmente la línea de préstamos directos que el ICO otorgará a las pymes, de hasta 200.000 euros por operación, que también verá hoy el visto bueno del Consejo de Ministros.
En cualquier caso, las medidas recogidas en el decreto-ley son bien vistas por la oposición, y muchos de sus portavoces se apresurron a señalar que estaban entre sus propias propuestas, aunque también advirtieron de que son insuficientes para afrontar la crisis que todavía afecta a la economía española.
Incluso el PP admitió ayer que apoyará el decreto-ley cuando se debata en el Congreso su convalidación.
Para el portavoz de Economía de los populares, Cristóbal Montoro, es “mejor poco que nada”, y también ha habido un “cambio de intención política” del Gobierno, que ha pasado de querer firmar un pacto de Estado en el Palacio de Zurbano a solicitar el apoyo a un decreto-ley.
CiU ya anunció hace dos días que apoyará el decreto, mientras que ERC votará a favor de éste o se abstendrá.
El partido más crítico es Izquierda Unida, que cree que las medidas son insuficientes e ineficaces y sospecha que el Gobierno busca una rápida convalidación del decreto, cuando este partido cree que debería tramitarse como proyecto de ley.
El decreto contendrá las medidas para impulsar la rehabilitación de viviendas, reducir los plazos para el uso del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) o garantizar la seguridad jurídica de los sistemas institucionales de protección (SIP) o “fusiones frías” para facilitar la unión de entidades financieras.