El jefe de la guerrilla colombiana Ejército de Liberación Nacional (ELN), Nicolás Rodríguez Bautista, alias 'Gabino', ha rechazado que el Gobierno imponga condiciones para iniciar un eventual diálogo de paz.
"Hemos sido reiterativos de manera pública y en particular, sobre nuestra disposición al dialogo con el Gobierno, concretando que es un diálogo sin condiciones para buscar la paz con justicia social en Colombia", ha indicado a través de una carta, según ha recogido el diario colombiano 'El Espectador'.
En la misma, el jefe guerrillero ha destacado que el presidente, Juan Manuel Santos, "ha usado los medios de comunicación para ponerle condiciones al ELN para desarrollar los diálogos". "Si de ello se trata, el ELN tendría igualmente muchos condicionantes", ha argumentado.
Entre dichos condicionantes, 'Gabino' ha citado "que aparezcan los desaparecidos por los agentes del Estado, que se den las garantías para que retornen a los lugares de origen los más de cinco millones de desplazados, que se haga justicia con los responsables intelectuales y materiales de los mal llamados 'falsos positivos' y que mejoren las condiciones carcelarias de los prisioneros políticos y de conciencia".
Por ello, ha solicitado "coherencia" al Gobierno, al tiempo que ha criticado que "exija confidencialidad" a la guerrilla mientras "el presidente se atribuye el derecho de usar los micrófonos y los medios para poner condiciones".
Las declaraciones de 'Gabino' han llegado una semana después de que Santos afirmara a través de Twitter que no hablará con la guerrilla hasta que proceda a liberar a todos los secuestrados.
Apenas un día después, el ELN liberó al cabo Carlos Fabián Huertas, secuestrado en mayo, lo que fue definido por Bogotá como un "gesto en la buena dirección".
Asimismo, la Policía ha revelado esta semana que el canadiense secuestrado por el la guerrilla fue visto con vida la semana pasada al ser trasladado por sus secuestradores de lugar de cautiverio.
Gernot Wober, geólogo de la empresa Geo Explorer, fue secuestrado en el sur de Bolívar el pasado 18 de enero. Desde entonces, tanto la Policía como el Ejército mantienen un dispositivo en la zona donde se produjo el rapto.
